Cuando un trabajador es despedido por una empresa, se le presenta un finiquito. Sin embargo, cuando este no está bien, el trabajador puede utilizar una papeleta de conciliación laboral para demandar a la empresa.
Ahora bien, ¿qué es una papeleta de conciliación laboral? ¿Para qué sirve exactamente? ¿En qué situaciones se puede utilizar? De todo eso es de lo que vamos a hablarte a continuación.
Qué es una papeleta de conciliación laboral
Lo primero que debes saber sobre la papeleta de conciliación laboral es su concepto. Se trata de un documento escrito que se presenta en el Servicio Autonómico de Conciliación (Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación (SMAC)) para llevar a cabo un acto de conciliación administrativa.
En realidad, no es una demanda judicial sino que es el paso intermedio antes de ir a un juzgado para tratar de conseguir un acuerdo entre el trabajador y la empresa sin que haya demandas judiciales de por medio. En caso de que no se llegue a un acuerdo, sí que habría que demandar en el juzgado y, por ende, utilizar la vía judicial.
Qué debe tener el documento de la papeleta de conciliación laboral
Si en algún momento necesitas realizar una papeleta de conciliación laboral debes saber qué hay que poner. En este caso, la papeleta de conciliación laboral no es necesario que la redacte un abogado sino que puedes hacerlo tú mismo. Pero es importante no dejarte nada fuera para evitar que no esté bien hecha (y puedan poner problemas al respecto).
Así, los datos que deben constar son los siguientes:
Identificación de las partes, con nombre completo, domicilio y DNI y CIF. A veces es conviene también poner correos electrónicos y teléfonos.
Descripción de la relación laboral. Aquí deberás detallar qué actividad has estado realizando, cómo era tu contrato de trabajo, tu jornada, si tenías antigüedad, el salario percibido, el convenio colectivo aplicable…
Los hechos. A continuación, tendrás que explicar los hechos, es decir, lo que ha motivado la presentación de la papeleta de conciliación laboral.
Presencia o no de abogado. Si estás asistido por un abogado, en la papeleta debe quedar claro que es así. Primero, para especificar que la papeleta ha sido redactada y firmada por un profesional. Y segundo para avisar que el trabajador irá acompañado de su abogado al acto de conciliación.
Fecha y firma del trabajador.
Ten en cuenta que deberás presentar varias copias (si es de empresa a trabajador, te harán falta cuatro copias).
Cuánto tiempo tengo para presentarla
Una papeleta de conciliación laboral no se puede presentar cuando uno quiera. Lo cierto es que hay un plazo por ley impuesto para presentarla. Todo dependerá del motivo por el cual se lleve a cabo. Por ejemplo:
Si es por un despido, tienes 20 días hábiles desde el momento en que el despido se hace efectivo.
Si es por un tema de reclamación de cantidades (salario, extras, etc.) entonces el plazo se amplía a un año.
Cuando se pone en marcha la figura de la papeleta de conciliación laboral el plazo para presentar una demanda se paraliza hasta el primer día hábil después de la cita de la conciliación. Pero es muy importante que esa conciliación se lleve a cabo antes de 15 días hábiles porque, a partir de esos días, vuelve a reanudarse el plazo para presentar una demanda en caso de que no sirva la conciliación.
Cuándo se debe presentar la papeleta de conciliación laboral
La papeleta de conciliación laboral está muy relacionada con el tema del despido. Normalmente, se utiliza cuando el trabajador no está de acuerdo con que sea despedido. Sin embargo, también puede utilizarse para reclamar una cantidad de dinero que la empresa no le ha pagado a este trabajador.
Hay ciertas situaciones en las que no es necesario presentarla, por ejemplo:
Cuando el despido es colectivo.
Cuando se demanda a la Administración Pública.
En caso de suspensión o reducción de jornada.
Por reclamaciones vacacionales o de movilidad geográfica.
En caso de que haya una modificación sustancial de las condiciones de trabajo.
Por conciliación de la vida familiar o laboral.
…
En todos esos casos que te decimos que no es necesario presentarla es debido a que, por obligación, ya se entiende que ha de haber un acto de conciliación previo a la demanda por la vía judicial.
Qué implica el acto de conciliación
Una papeleta de conciliación laboral abre las fases para un procedimiento de conciliación, es decir, una reunión entre la empresa y el trabajador para intentar llegar a un acuerdo que permita zanjar el tema y no llegar a la vía judicial. Este es quizá una de las mejores acciones a llevar a cabo ya que no supone un desembolso económico y la solución se pacta entre las dos partes (no es un tercero quien toma la decisión).
La primera fase del acto de conciliación se inicia en el mismo momento en que se presenta la papeleta en el órgano competente. Como sabes, va a depender de cada comunidad autónoma.
La segunda fase consiste en el traslado de la papeleta a las partes implicadas. En este caso, a la empresa. Ahora bien, no solo es el hecho de poner en conocimiento a la empresa de que un trabajador ha presentado la papeleta, sino que esta ya llevará aparejado el día y la hora en que deben reunirse.
La comunicación se realiza siempre certificada y con acuse de recibo, para verificar que la empresa lo ha recibido y que no pueda alegar que no estaba enterada.
La tercera fase es la celebración de la conciliación. Es decir, acudir el día y hora señalada al acto de conciliación. Aquí habrá una persona que mediará entre el trabajador y la empresa y cuyo objetivo es el de intentar que se llegue a un acuerdo.
Tras el acto, puede ocurrir lo siguiente:
Que haya acuerdo, y por tanto el trabajador y la empresa se han puesto de acuerdo y ahí termina todo.
Que no haya acuerdo: y aquí ya corresponde al trabajador decidir si va a demandar o no a la empresa.
Incomparecencia: que puede ser por parte de la empresa o del trabajador. Si es por parte de la empresa, el trabajador tiene que interponer la demanda en el Juzgado de lo Social y si el juez falla a favor de este la empresa se hará cargo de todas las costas. Si es el trabajador quien no acude y no tiene causa justificada, se archivará el procedimiento.
La última de las fases es la elaboración del acta de conciliación donde queda reflejado cuál ha sido el resultado de ese acto. Si se quiere seguir con la demanda, será necesaria para acreditar que se ha intentado este paso previo. Y si se ha llegado a un acuerdo y la empresa no cumple, también será una prueba para reclamar ante un juzgado.
¿Te queda clara ahora la función de una papeleta de conciliación laboral?
